All posts tagged: perdidos

PAUTAS: «Mamá, Papá ESTE VERANO NO ME PIERDO»

«Papá, Mamá: ESTE VERANO NO ME PIERDO»

Existen una serie de noticias que cada año vemos en los telediarios, parece incluso que son los mismos reportajes todos los años: operaciones salida-llegada, playas abarrotadas, incendios y el que es el tema de este post: los niños perdidos o rescatados en playas y piscinas de toda España.

¿El problema? Que son niños y no tienen los recursos fisicos o psicologicos que puede tener una persona adulta para  gestionar una  situación o pedir ayuda en caso de necesitarla.

La desaparición de un niño es uno de los  grandes miedos tanto para los más pequeños como para los padres.

 

Niño jugando en la arena de la playa

 

Cuando se pierde un niño en la playa o en un centro comercial es un momento en el que se te encienden todas las alarmas.

Bastan milésimas de segundo para que el miedo te invada y tu instinto te avise de que hay algo que está en peligro en tu entorno y debes reaccionar. “Mi hijo puede que esté en peligro, y no se dónde está“.

 

Es lógico que te invadan pensamientos de todo tipo por tu cabeza, es el miedo, y es normal.

¿Será capaz de pedir ayuda?

-¿Se sabe mi número de teléfono?

-¿Donde estará?

-¿Le habrá pasado algo? ¿Estará bien?

 

¿POR QUÉ RAZONES SE PIERDEN LOS NIÑOS?

NIÑOS: LA CURIOSIDAD LES PUEDE.

Los niños juegan, se despistan y en muchas ocasiones la emoción de la curiosidad les traen malas pasadas. Ya sabemos como son, y les encanta observar y descubrir mundo, gracias a eso aprenden infinidades de cosas. Sin embargo, en otros momentos se dejan llevar demasiado por la curiosidad y pierden el sentido del peligro. Éste último, nos ayuda a sobrevivir, y se llama miedo, una gran emoción, eso sí desagradable, cuya utilidad es prevenir el peligro e incluso reaccionar ante él en caso necesario.

PADRESDESPREOCUPACIÓN Y CONFIANZA.

 

La creencia de que el niño es suficientemente mayor como para que se pierda es un grave error, ya que cualquiera puede desorientarse o despistarse. El día a día con los niños requiere de mucha atención, y el cansancio y la confianzasabe lo que hace, se conoce la playa de memoria«) en él hacen que «bajemos la guardia».

En definitiva, la confianza en los mas pequeños incluso el auto-engaño de que nuestros hijos no se perderán hace que nos despreocupemos y no estemos tan alertas «por si las moscas».

 

 ¡OJO! Lo ideal es que tanto el niño como los padres se mantengan en un estado de tranquilidad y confianza, sabiendo que  existe la posibilidad de perderse.

 

¿Qué pasa por la cabeza del NIÑO en esos momentos?

SENSACIÓN DE ABANDONO: «Me he perdido, me han abandonado»,

TRISTEZA: «Se han ido sin mi».

MIEDO Y ANSIEDAD: «¿Y si alguien me hace daño?», «¿Y si no les encuentro?».

La sensación de desprotección es tan grande que el niño se asusta y siente miedo de no encontrar a sus padres. Se siente indefenso, porque es una situación que le supone adquirir unos recursos que aún es natural que no tenga aprendidos por sus referentes. Además, el miedo nos bloquea o nos hace actuar (escapar), y teniendo en cuenta que hablamos de un niño, es difícil que éste pueda gestionar bien esa emoción.

 

¿Qué pasa por la cabeza de los PADRES?

niños miedo perderse

CULPA: «Estaba distraído/a, ha sido un segundo y ya no estaba«.

Cuando cometemos un error, nuestra conciencia nos lo recuerda constantemente y más aún si tiene que ver con nuestro hijo. 

RABIA: «Cuando le encuentre, le voy a echar una bronca…«.

En ocasiones, el miedo y la rabia van unidas. Nunca se debe castigar a un niño por haberse perdido, seguramente éste habrá pasado tanto miedo que habrá aprendido del error. No pagues tu susto con él, recuerda que el también se ha asustado muchísimo.

MIEDO: «Si le pasa algo me muero». «Siempre le he dicho que no hable con extraños… no va a saber reaccionar«.

 Lo primero que se les enseña a los niños es que no deben hablar con personas extrañas, pero ¿Sabrán diferenciar que existen excepciones cuando uno está en peligro o es una emergencia?

ESPERANZA: «Espero que sepa lo que tiene que hacer».

 

¿NOS ESTAMOS VOLVIENDO SOBREPROTECTORES?

La sobreprotección nace desde el momento en que evitamos que los más pequeños sientan y conozcan las emociones desagradables como el MIEDO, la TRISTEZA, la FRUSTRACIÓN… Debemos comprender que los niños deben experimentar todas estas emociones, de esta manera irán conociendo qué se siente en esas situaciones, e irán aprendiendo a gestionarlas saludablemente.

niños playa perdidosDe hecho, la mejor manera de proteger al niño es CREER EN ELLOS, haciéndoles ver que son capaces, que  para conseguir algo hay que luchar, y ello supone que exista un esfuerzo detrás. Si les damos todo hecho, creerán que no son capaces de hacerlo solos, y justificarán esa ayuda que se les da. Es probable que necesiten ayuda en el camino del aprendizaje, por eso se les ofrecerá solo si la necesitan.

Es decir, ESTAR CON ELLOS PERO SIN ELLOS. Que los niños sepan que estáis ahí por si lo necesitan, mientras ellos hacen su camino del aprendizaje a un mundo nuevo.

El miedo, las fobias, las inseguridades, el apego ansioso y dependiente, son elementos de un círculo vicioso que pueden acompañar al niño en su crecimiento hasta la adultez, llegando incluso a un trastorno, si no se realiza un tratamiento psicológico o  Psicoterapia.

Con todo esto, debemos saber que ésta SOBREPROTECCIÓN de la que hablamos conlleva un “mal querer”, sabiendo que el «BIEN QUERER” lo encontraremos dejándoles SER, CRECER, SOLOS y a NUESTRO LADO.

 

¿QUÉ HACEMOS SI NUESTRO HIJO SE PIERDE?

1.PREVENIR: Establecer un protocolo de actuación con el niño en caso de que se pierda.

  • Que sepa el número de teléfono de los padres.

  • Que sepa identificar a policías y socorristas como personas de confianza.

  • Que sepa su nombre y apellido.

  • Que sepa que si se pierde no significa que le hayan abandonado. ASí no perderá la calma, se sentirá más seguro.

2. NO PERDER LA CALMA.  

3. NO MOVERSE DEL PUNTO DE PÉRDIDA. En caso de ser dos personas, que una se mantengan en el lugar y la otra, acuda a buscar al policía o socorrista más cercano.

4. TENER EL TELÉFONO LIBRE PARA PODER RECIBIR UNA LLAMADA.

5. CALMA, USA TU RAZÓN.

Debemos pensar con la RAZÓN e intentar tranquilizar al MIEDO. Por lo tanto, la clave está en saber si tu hijo tiene esos recursos que tú le debiste dar en su día para saber actuar. De esta manera, podrás tranquilizarte sabiendo que te llamará en cuánto comunique a alguien que se ha perdido. CALMA.

padres niños perdidos

6. EDUCACIÓN POST-PERDIDA

Que el niño se pierda no debe ser motivo para echarle la gran bronca, al fin y al cabo estaríamos pagando nuestro susto con él. El/ella también ha pasado miedo, y de estas cosas también aprenden.

  • SI ESTÁ NERVIOSO CÁLMALE. Dale ese cariño que necesita y exprésale que el susto ya ha pasado. Si es necesario puedes hablar con él más tarde, probablemente no sepa entenderte bien por los nervios del momento.

  • SI ESTÁ CONFUSO porque no es del todo consciente de lo que ha pasado, es bueno que le digas que estabas muy preocupado porque no sabías dónde estaba. Tiene que entender que lo que ha pasado no debe repetirse. Es importante que el niño sepa cuales son los peligros, eso sí, trata de no meterle más miedo.

  • Dile lo mucho que te alegras de haberlo encontrado.

  • Más tarde, cuando todo haya pasado, analizad en qué momento y por qué se perdió.

 

 

¿QUÉ SE PUEDE HACER PARA PREVENIRLO?

EDUCAR O ESTABLECER UN PROTOCOLO DE PERDIDA CON EL NIÑO

 
VIGILAR PERO SIN PASARNOS 

Los padres debemos estar atentos teniendo en cuenta que a los 3-4 años el sentido del espacio, tiempo y del peligro aún es muy limitado. Se debe dar cierto margen para que el pequeño pueda moverse y descubrir cosas nuevas de su entorno, tratando de no caer en la sobreprotección. Lo más acertado sería estar alerta, pero dejando que el niño se mueva y desarrolle sus recursos para saber que puede descubrir cosas sin la necesidad de sentir que están sus padres ahí.

 

NO SUELE SER DE GRAN AYUDA…

  • La recomendación de explicarle que si se pierde se acerque a un sitio determinado, por muy llamativo que sea.

  • A los 3 años los más pequeños no anticipan las situaciones, por lo que hacer simulacros será como un juego para ellos.

  • Hasta los 5-6 años los niños no conocen bien el entorno social y no distinguen uniformes. Las recomendaciones de dirigirse a policías no funcionarán hasta esas edades.

  • SISTEMAS DE IDENTIFICACIÓN PARA NIÑOS: Existen pulseras identificativas y dispositivos vía bluetooth para niños pero han demostrado no ser muy efectivas ya que son incómodas o son quitadas por los niños o carecen de alcance y batería suficiente.

    Sin embargo, este último es un campo en constante innovación y recientemente descubrí el sistema Emerid System para la identificación de personas deportistas y por supuesto niñas y niños.flor-estrella-nina-detras-e1499281226969-510x359

    Este sistema aprovecha una tecnología presente en nuestra vida diaria como el NFC (tarjetas del metro, crédito, gimnasio..) que no necesita batería o mantenimiento y que además es resistente al agua o el calor y se integra en bañadores para niñas o niños y en trajes de neopreno.

    emerid system bañador

    De esta manera nuestros hijos estarán constantemente identificados gracias a que el chip proporciona al instante información identificativa, médica y de contacto para comunicarse con los padres lo antes posible.

    En su página web https://emerid.com/ puedes descubrir más acerca de este sistema.

 

Y RECORDAD….

Tenemos que tener claro que los niños…niños son, y nosotros también lo fuimos.

Y que perderse al igual que fallar tiene su parte buena…..

 

 Quizás te interese leer otros post sobre:

LA SOBREPROTECCIÓN Y SUS CONSECUENCIAS

Los miedos: gran corto de Pixar